Icetex aplasta el sueño de 916 mil estudiantes | por los derechos humanos

Icetex aplasta el sueño de 916 mil estudiantes

Fecha: 11/04/2022

Por: Andrés Ríos

 

Daniel Torres fue un deudor de Icetex por 12 años años, prestó 29 millones, le cobraron 62, y aún así, también tuvieron la “delicadeza” de embargarle la casa a su madre. Eso le ocurrió en 2013, y cuando le ocurrió esto, comenzó a conocer cómo funcionan los derechos en este país. Él juraba que el Icetex prestaba un auxilio, cuando alguien pasa un momento económico adverso para poder cumplir su sueño de estudiar, y se convirtió en todo lo contrario: una pesadilla.

Siendo un ciudadano común y corriente, que vivió todas las intimidaciones y amenazas de las casas de cobro del ICETEX; sin venir de un clan económico o político, sin haber tenido un cargo público, sin ser de dinero, ni venir de una familia de apellido; decidió tomar la vocería cuando se graduó de Ingeniería Eléctrica al alzar su voz con el movimiento “Icetex Te Arruina”, enfrente del Congreso de la República, única y exclusivamente con la persistencia y la terquedad de querer cambiar esta situación, que afecta a cerca de 916 mil usuarios, que para la entidad, parecen ser solo clientes.

Se encontró con esta crisis social enorme y evidenció como la educación se convirtió en una mercancía, creó la página ´Icetex Te Arruina´ en Facebook y Twitter que tienen cerca de 50 mil personas, recopilando experiencias de todo lo que pasa con esta entidad.

“El suicidio de los jóvenes es probablemente el resultado más diciente de la tortura que provoca una entidad del Estado, es una tragedia que le ocurre a Colombia. Cuando embargaron a mi madre tuve sentimientos muy fuertes, no me ocurrió eso personalmente, pero he visto esos casos de jóvenes de 20 o 25 años que atentan contra su vida. Mensajes como: ¿si yo me quito la vida, se libra mi familia de la deuda?””, mensajes que le llegan continuamente a su celular.

Por eso, es enfático en asegurar que las personas que gobiernan esta institución no están dispuestas a cambiar esta realidad, los únicos que pueden cambiar esto son los afectados. Fue candidato al Senado, donde vivió en carne propia lo difícil que es para un candidato ciudadano llegar a un cargo público, al denunciar que hasta su propio voto no apareció, ni el de mucha gente que quiso apoyarlo en estas elecciones de Congreso, del 13 de marzo de 2022. De todas maneras, manifiesta que intentará incidir en los candidatos presidenciales, para que en sus programas de gobierno, puedan incluir sus propuestas para rescatar a todos los usuarios del ICETEX y convertir la educación en un derecho y no en un negocio.

“Lo que hace el ICETEX para sostenerse es utilizar la estrategia de la desinformación, la cual aplica con sus usuarios, los medios de comunicación, con el propio gobierno y el Congreso. Para el ICETEX los ciudadanos son clientes, un ejemplo es cuando un joven de 17 años llega buscando una solución para estudiar y estos nunca hablan de otras alternativas, lo único que les ofrecen son créditos de consumo a personas de estratos 1, 2 y 3. Saben que no tienen educación financiera y ellos se aprovechan de eso, y no le informan de todo lo que ocurre: que el Icetex capitaliza intereses que es el cobro de intereses sobre intereses, que los pueden reportar en centrales de riesgo para bloquearlos del sistema financiero, que los pueden embargar y que la gran mayoría de promesas de condonación, están sujetos a metas que son irrealizables y repletas de asteriscos”, asegura Daniel Torres.

Constantemente le preguntan al presidente del Icetex, Manuel Acevedo, quién los vigila, y frecuentemente dice que los vigila la Superintendencia Financiera, pero lo que no cuenta es que solo los vigila sobre un pequeño rubro, llamado TAE, de 7 mil millones de pesos y no los vigila sobre los más de 12 billones que pertenecen al presupuesto del ICETEX, así que queda la duda ¿qué pasa con el control del resto del dinero?

Daniel Torres manifiesta que el Icetex es irreformable, por lo cual la única forma de rescatar a los usuarios es acabar con esta entidad.  Este activista se ha sentado con el gobierno de Santos y de Duque, pero al final ambos gobiernos terminaron saboteando las propuestas para mejorar la estructura de esta entidad. En el año 2005 con la ley 1002 de este año, El ICETEX se desnaturalizó y se convirtió en un banco que se rige por el derecho privado, es decir, le permite a la entidad recibir billones del presupuesto de la nación y de los usuarios, y gastarlo como si fuera una tienda de barrio, sin ninguna clase de control.

Desde su liderazgo expresa que los medios de comunicación han sido quienes permitieron que esta crisis social, que estaba oculta, surgiera. Valora el poder que tienen los medios, en Colombia existen crisis sociales terribles como los niños que se mueren de hambre en La Guajira o el asesinato de los líderes sociales, lo que él asegura representar, es una crisis social que afecta al 10% de los jóvenes de Colombia que son usuarios del Icetex, y que por su deseo de estudiar, han sido condenados a pagar unos créditos impagables; así como verse amenazados por una entidad del Estado.

Sin embargo, vivió una situación particular con medios tradicionales como El Colombiano y El Tiempo. Durante la pandemia le fue muy difícil comunicar la realidad de los jóvenes que se suicidan o se quieren suicidar por las afectaciones del Icetex, pero sabía que había que hacerlo, de tal manera, que no caiga en sensacionalismo, porque es una realidad que hay que atender. Hace 3 años comenzó a documentarlo, y cuando ya tenía lista la investigación de la grave afectación del Icetex sobre la salud mental de sus usuarios, acudió a los medios que pensaba que eran solidarios, porque muchos periodistas han sido afectados también; pero cuando lo fueron a publicar, de un instante a otro se quedaron callados. Al mismo tiempo, empezó a percibir que en estos medios el Icetex comenzó a gastar mucho dinero en publicidad. Luego de varios meses, un periodista le contó que el presidente de esta entidad, llamó al director de noticias y ahí se detuvo todo.

“He visto que los directivos del Icetex utilizan el dinero de los usuarios para despilfarrarlo en publicidad y tapar así los escándalos; entonces lejos de los periodistas que tienen una gran ética o un propósito periodístico, existe una realidad comercial y el Icetex utiliza ese dinero para censurar estas investigaciones”, contó Torres.

En sus investigaciones, ha encontrado que esta entidad está conformada en su gran mayoría por funcionarios con formación en derecho, economía y finanzas, y muy pocos con formación en el sector de la educación. De acuerdo con su versión, ellos utilizan todo este poder de abogados para aplastar a los usuarios. Siendo muy pocos los casos en que la gente de manera individual gane una demanda. La vez que sí hubo una demanda que se ganó fue en periodo de pandemia, cuando la gente se quedó sin trabajo, se cayó la economía, y a pesar de eso, Icetex creó unos supuestos alivios que terminaron siendo un producto financiero que generaron más intereses. En el año 2020, la Corte Constitucional y el Consejo de Estado emitieron dos fallos para que el Icetex no se aprovechara de la pandemia y se detuviera la generación de más intereses a los usuarios, aunque para algunos usuarios esto no se cumplió en todos los alivios.

Pero la situación más crítica la vivió en el año 2018, había una acción jurídica contra el señor Campo Elías Vaca Perilla, el hermano de un coronel que estaba involucrado en una masacre. A finales de los 90 y principios del 2000, el gobierno hacía transacciones para vincular a familiares de militares retirados en el Estado. En este caso, le dieron puesto a este funcionario sin tener la competencia requerida para ejercer sus funciones.

“Se robó demasiado dinero y él era ordenador del gasto sobre cientos de miles de millones y los podía gastar a su parecer. Por ejemplo, había un contrato de un evento de 300 millones que tenía unas cosas ridículas como: en el contrato había una bailarina, que, por danzar 3 minutos, le dieron 9 millones de pesos; por los refrigerios se gastaron 50 millones de pesos y con cualquier excusa legalizaron los recursos”, afirma Daniel Torres.

Luego de una denuncia ante la Procuraduría, pensó que no iba a tener efectos, pero imputaron al señor Vaca Perilla por un asunto grave de peculado. 6 meses después seguía acudiendo a las audiencias, en las que solo asistía él y las partes involucradas, porque ni siquiera la Contraloría se animaba a hacer acto de presencia.

Se comprobó que hizo corrupción contra el Estado, en una ocasión encontraron al activista, Daniel Torres, afuera de una audiencia y lo comenzaron a golpear y a amenazar. En su momento se asustó porque sabía que tenían vínculos con paramilitares. En ese entonces, pensaba que el señor iba a ser condenado, en esa ocasión llegó más temprano a la audiencia y se dio cuenta que el abogado era muy amistoso con el procurador delegado; algo que le pareció sospechoso. En todo caso, entró al salón y leyeron todo el prontuario con todas las irregularidades, pero al final, el procurador dijo lo siguiente: “dice que el señor Vaca Perilla queda absuelto de haber atentado contra el erario público, porque sabía que hay un presupuesto en el Icetex que dice recursos propios. Según esta entidad, hay una figura legal para que el dinero que pagan los usuarios no lo conviertan en presupuesto público y lo ponen en una bolsa que dice recursos propios; por esto no es sujeto a vigilancia por las entidades de control y los funcionarios corruptos en el Icetex se aprovechan para hurtar el dinero de la educación”, relata el activista de lo que vivió en la audiencia.

“En este momento me di cuenta de que el Icetex es una entidad que cada gobierno de turno aprovecha para hacer clientelismo y corrupción, con el detalle de que el actual gobierno piensa plagiar la ley 1911 de 2018, para que los usuarios, si llegan a fallecer, sus impagables deudas con el Icetex van a ser heredadas a sus familiares”, concluyó de manera contundente Daniel Torres.

Aunque ha logrado avances como incidir en la ley 1886 del 2018 que acabó con un perverso impuesto del 10% sobre los saldos en mora de los usuarios cobrados con amenazas por los ‘chepitos del Icetex’, un negocio superior a los 70 mil millones que tenían los directivos de la entidad para favorecer a sus ‘compradres’, sigue pensando que la única forma de salvaguardar a los usuarios es creando un ambicioso plan de salvamento y acabando con la entidad; que pese a que la contactamos, para que dieran su versión de los hechos, no nos contestó sobre las irregularidades que siguen aplastando los sueños de los estudiantes en Colombia.