Sanluisanos marcharán en defensa del patrimonio ambiental del río Dormilón
Este viernes 27 y sábado 28 de enero los habitantes del municipio de San Luis convocaron a una marcha para proteger el patrimonio ambiental del río Dormilón, debido a que, según la comunidad y vigías del río, se está primando el interés económico para generar una hidroeléctrica en dicho caudal, en vez de conservar y preservar el beneficio que ambiental que ha sido históricamente este río para la población.
El día 27 se realizará por medio de un videoforo una socialización sobre la situación que presenta actualmente el río, y el 28 iniciará una marcha desde la parte urbana hasta la vereda San Francisco donde está ubicado el río Dormilón.
La manifestación se llevará a cabo porque los movimientos ambientales como vigías del río, argumentan negligencia por parte de las autoridades como CORNARE, la Alcaldía del Municipio y el concejo de San Luis para defender los intereses colectivos por encima de los económicos y particulares.
Esta invitación a la acción colectiva se soporta en las siguientes motivaciones, según el comunicado de Vigías del río:
Hace ya casi dos años, el 11 de marzo de 2015, más de 300 sanluisanos acompañados por ciudadanos y movimientos sociales del Oriente Antioqueño y el departamento, nos movilizamos en una marcha por la autopista Medellín – Bogotá desde el puente de El Santuario hasta la sede principal de Cornare.
Su propósito fue exigir a la autoridad de gobierno ambiental Cornare, que resolviera a nuestro favor el procedimiento de declaratoria de caducidad de las concesiones que había otorgado a una empresa para que usara el 75% de las aguas del río Dormilón en la producción de hidroenergía. La comunidad ya había denunciado públicamente las condiciones de inequidad, injusticia, riesgo ambiental y engaño que caracterizaba este proyecto.
En desarrollo de esa manifestación, fue celebrado un diálogo en el auditorio de Cornare entre los marchantes y los directivos de la Corporación Ambiental. En éste se produjeron dos situaciones de alto valor para la comunidad sanluisana: Primero, se conocieron las Resoluciones que revocaban los permisos de uso del agua del río Dormilón y devolvía nuevamente los derechos a los sanluisanos sobre este patrimonio ambiental.
Segundo y no menos importante, hubo acuerdo y compromiso entre las partes, CORNARE y comunidad, para trabajar por el futuro del río Dormilón tal como lo soñamos los sanluisanos: su protección y conservación para seguir disfrutando los innumerables servicios ambientales que éste nos provee. Como quedaría plasmado días después en la sistematización del proceso ciudadano de defensa de este patrimonio ambiental, “trabajaríamos por el desarrollo de una política pública de protección y conservación del río Dormilón”.
Lamentablemente para nuestros intereses comunitarios y el menoscabo de la credibilidad en la institucionalidad del Oriente Antioqueño, CORNARE no ha cumplido con el solemne compromiso que realizó ante el pueblo que llegó a sus instalaciones a solicitar su protección.
De cara al compromiso de CORNARE en el rol de autoridad oficial para emitir una normativa que le otorgue legitimidad jurídica a la política pública de protección y conservación del río Dormilón, elude su promesa manifestando en relación a una posible declaratoria de Área Protegida que: “…entre los estudios que soportan las prioridades de conservación para Antioquia y para la región de CORNARE, el río Dormilón no ha hecho parte de éstas…” (Oficio 130-1110 del 6 de abril de 2016).
Al contrario de lo prometido con la comunidad, meses posteriores a la reunión con los manifestantes del 11 de marzo de 2015, CORNARE expidió permiso a la empresa (ahora bajo el rótulo de Taborda Vélez y Cía) para llevar a cabo estudios y “proyección de obras para su futuro aprovechamiento en el sector hidroenergético”. Igualmente a la empresa Integral S.A (bajo el rótulo jurídico de I-DOS), para que hagan lo propio en zona del río Dormilón y Samaná Norte que meses antes iba a ser inundada con la hidroeléctrica Porvenir I, cuya licencia fue negada por la ANLA.
La alcaldía y el Concejo Municipal tampoco asumen sus competencias y voluntades para proteger lo que la comunidad demanda. El Concejo municipal, ante la solicitud de que usen los instrumentos legales que les da el Estado en ejercicio de la autonomía municipal, han “cedido” esta valiosa competencia, manifestando que “Desde el punto de vista legal son las CAR y el Ministerio del Medio Ambiente, las que están facultadas para regular el uso del agua“.
La alcaldía municipal, desconociendo todo el proceso ciudadano de más de 4 años en que ha defendido y solicitado la protección del río como patrimonio ambiental, ha claudicado a las intenciones de la empresa en detrimento de este querer ciudadano, por intereses puramente economicistas, con la promesa de que le VENDERÁN parte de ésta.
En conclusión, el pueblo de San Luis está desprotegido de sus autoridades locales y ambientales, y expuesto al poder económico que llega a través de empresas comerciales privadas, a las cuales nada les significa este patrimonio ambiental que San Luis ha protegido, conservado y vivido.
Hacemos un llamado a la ciudadanía de San Luis, del Oriente Antioqueño y la comunidad en general, para que, ante la negligencia de las entidades gubernativas por proteger este valor natural, invoquemos la voluntad del pueblo a través de nuestro legítimo derecho a la manifestación y la protesta pacífica.
Que el río Dormilón sea un ejemplo de resistencia y lucha por el patrimonio ambiental del Oriente Antioqueño y del país.
Vigías del río Dormilón
Deja una respuesta