Tejemaneje al interior de algunas veedurías ciudadanas | por los derechos humanos

Tejemaneje al interior de algunas veedurías ciudadanas

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Las veedurías son grupos de ciudadanos reunidos de forma voluntaria que vigilan  la inversión de los recursos públicos en la ciudad, pero como en todo lo que hay dinero, hay intereses, pujas y cacicazgos que limitan un buen proceso de control y seguimiento.

Según el representante de REVEECOL (Red Integral de Veedurías de Colombia), Hernán Darío Orozco Sánchez, el Banco Interamericano de Desarrollo invertirá 30 millones de dólares para potenciar las veedurías y los observatorios en el país, pero dejó muy claro: “Si no nos organizamos, esta plata va a parar a pagar favores políticos. El poder soberano radica en nosotros los ciudadanos y nos hemos dejado usurpar el poder, lamentablemente”.

Con respecto a los intereses personales y los cacicazgos que rodean los mecanismos de participación, como lo son las veedurías, el veedor, Abraham Robledo Lagarejo, salió al paso para denunciar cómo se están manejando estos procesos: “Eso no tiene dueño, si al señor no le gusta lo sacan a uno. Asistí a varias reuniones y porque uno tiene una opinión independiente el señor lo quiere coaccionar a uno para que vote como él quiera, o entonces lo saca y no lo tienen en cuenta. Mi denuncia ante la Personería es si él es el dueño y puede abusar de sus funciones”, le dijo al presidente de Reveecol.

Asimismo, el veedor Horacio, aseguró que “Nosotros tenemos que partir de quién soy yo y para dónde voy, para qué soy control social. Plata cualquiera puede tener pero quién la está manejando, cómo la va a manejar y por qué. Porque nosotros estamos perdiendo credibilidad y respeto. No me he podido posesionar como fiscal por unas conductas irregulares en que se han incurrido. No solo podemos ser veedores para ver qué me van a dar, nuestra labor es para servirle a la comunidad, por eso le pido a los veedores primero vigilarnos a nosotros mismos”.

Martín Emilio Quiceno, veedor de la comuna nueve, manifestó que las leyes en Colombia están escritas pero faltan los hombres que las hagan cumplir, pues cuando las denuncias son contra políticos se quedan en nada, hablan de participación y se cuestionó ¿Cuál nos dan? Que trabajemos, pero no tenemos respaldo decisivo.

A esta labor de control social y de ciudadanía para que se haga el uso correcto de los dineros públicos, no se le puede permitir que se pervierta, debido a que son los únicos procesos colectivos de los cuales la población se puede empoderar para hacer control político.

“Desafortunadamente, no tenemos sentido de pertenencia por lo público ¿Qué podemos esperar del Estado si en las organizaciones pequeñas no nos organizamos? Las veedurías son los ojos de los recursos públicos en el territorio”, concluyó la personera delegada de la unidad de protección al interés público, Viviana Alexandra Viviescas.

Denuncia del representante de Reveecol

“Hago un paro en la Continental Gold en Buriticá nos tienen sometidos, y como dice el ingeniero José Luis, los ilegales no son los campesinos descendientes de los indígenas que llevan cuatrocientos años con bateitas, los ilegales son la Continental Gold que viene a usurparnos y a depradar nuestro territorio ¿Cómo es posible que lo permitamos por ignorancia? Por falta de conocimiento permitamos que destruyan nuestro pueblo.  ¿Cómo es posible que la continental gold lleve treinta años en periodo de prueba sacando pruebas, llevándose el material a toneladas en helicóptero a Canadá donde no tiene control fiscal? ¿Cómo es posible que sigamos permitiendo ese saqueo en nuestro país? ¿Cómo es posible que a un minero que le cojan un taco de dinamita para dinamitar una roca lo tilden de guerrilero? Y a la continental gold en el ejército le lleven la dinamita por toneladas ¿Entonces quiénes somos los responsables del control social? Nosotros”.

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