«Desarrollo y desalojo» Juana Cardona

En el año 2014 con la construcción de la vía tranviaria de Ayacucho realizada por el Metro de Medellín, con su construcción afectó a su paso algunos sectores del barrio Buenos Aires, como Miraflores y San Luis, en el barrio Alejandro Echavarría, San Luis llevó quizás la peor de las partes, fue dinamitado con un mal procedimiento técnico (Para cargas ANFO 1100 g. detonadas a una profundidad de 8.0 m, lo cual excede el rango recomendado por la U.S Bureau of Mines en un radio de 7.0 m.). para este entonces más de 200 familias, fueron desalojadas, debido al agrietamiento y fisuras que presentaban las viviendas, con la promesa de regresar cuando las casas se arreglaran y con un reasentamiento en sitiú ( existe la declaración de la Gerente del Metro Claudia Restrepo para ese entonces) las familias salieron con un arriendo temporal, el cual ya lleva cinco años, tiempo éste en el que las familias han estado fuera de su entorno, viviendo un proceso de desarraigo paulatino, el tejido social se ha ido resquebrajando, oportunidad hecha para que la administración municipal aparezca ahora con una expropiación administrativa, dirigida a los propietarios de la zona.
Para los habitantes del barrio San Luis no cabe la menor duda que el Metro de Medellín, con la construcción de la vía del Tranvía, dañó las viviendas, afectó el patrimonio familiar y desarraigó a sus habitantes.
Que el municipio de Medellín, los abandonó a su suerte y en vez de exigirle al Metro pagar los daños, indemnizar las familias, lo que hizo fue declarar una urgencia manifiesta con utilidad pública para que así los predios cambiaran de dueño, desconociendo el daño que antecedía a este lamentable hecho.
El Metro mantuvo bajo su custodia todas viviendas del barrio San Luis, viviendas que al estar desocupadas y sin un seguimiento oportuno de la vigilancia, las fueron desmantelando, y las viviendas cada día a medida que ha ido pasando el tiempo se ven más deterioradas y caídas.
Pasados tres años y para otros cuatro, el Isvimed en un contrato interadministrativo con el Metro, informaron a las familias que iniciaba la compra de los predios, el avalúo que presentó el ISVIMED, realizado por la lonja de Medellín, ha tenido todos los reparos, porque las casas las afectaron por el daño con la dinamita, luego con el abandono y falta de mantenimiento; estos elementos bajaron los ítems del avalúo, y por consiguiente la oferta es demasiado baja y no alcanza para comprar una vivienda de reposición en el barrio donde se ha vivido toda la vida más de 50 años, pues hay familias que fueron ofertadas con escasos 40 millones de pesos con lo cual no se compra una casa en Buenos Aires, y se evidencia claramente que para darle paso al desarrollo económico de la ciudad con un Tranvía, la administración pasa por encima de los Derechos de los habitantes y la vulneración del Derecho a la vivienda Digna y con esto se hace aún más Evidente.
La oferta de compra la presentó el ISVIMED el año pasado, algunas familias se han enajenado voluntariamente, pues el arraigo y sentido de pertenecía esta menguado, y piensan que es mejor recibir poco a perderlo todo, otras familias se resisten a entregar sus viviendas a tan bajos costos, lo grave es que allí en el barrio no todas las familias se encuentran en arriendo temporal, para explicar que aun allí residen familias en el sector y esta semana el Metro ha iniciado actividades para la demolición de las viviendas enajenadas, poniendo a riesgo la vida, la integridad ,la afectación de la salud para los niños y los adultos que allí viven, sin conocerse un plan de intervención.
Cabe anotar que en su mayoría son personas de la tercera edad; otra de las perlas con las que salió la administración es que a las familias enajenadas voluntariamente todavía no les han pagado el valor de sus casas ¿cuál es la urgencia de la demolición? ¿O se trata de una expulsión tajante de pobladores del territorio?
JUANA CARDONA CARDONA
https://www.youtube.com/watch?v=KMSmYnQ0ifc
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