¿Políticamente incorrectos o demasiado correctos?

Fecha: 05/07/2020

Autor: Andrés Ríos

Que determinado sector de la iglesia defina las elecciones en Colombia, que aún hayan revolucionarios tontarrones que todavía crean que la solución es por medio de las armas, que el asistencialismo ha sido el placebo perfecto en las ciudades para adormecer la masa crítica, que la academia sea la sirvienta de las alcaldías y que el ethos paisa solo gire en torno al Dios dinero; son las descripciones que adornan el acontecer cotidiano.

Significa no haber aprendido la lección, si no entendimos que  en Medellín la sed de poder hizo que hasta entre las mismas milicias urbanas se disputaran el control territorial hace unos años (dejando a los civiles en el medio) solo por tener ideologías “diferentes”, que algunas administraciones municipales se apoyen en las bandas que controlan el territorio para hacer sus proyectos urbanísticos y que lo que les fascina a las castas políticas que han gobernado, es que haya un movimiento subversivo, para poder arremeter como ellos saben con sus ofensivas contrainsurgentes.

Entre tanto zurdo y derecho tan fanático que les permite ver la realidad sesgada, la miopía les impide ver a los derechos que La Operación Cóndor exterminó por sospecha todo lo que fuera oposición al gobierno en el continente, así como que el socialismo del siglo XXI en Latinoamérica se han convertido en unas dictaduras dibujadas como en Nicaragua y en Venezuela; algo similar al caso colombiano aunque sea de derecha, más de 90 mil desaparecidos, pese a que se diga que en nuestro país solo haya habido una “dictablanda”.

Que el pueblo colombiano sea más o igual de corrupto que sus dirigentes, que los denominados líderes pidan dinero a favor de una cuenta personal en pandemia, que los gobiernos globales y locales hayan hecho de esta situación una “plandemia”, pues solo en Antioquia hay alrededor de 19 mil millones en comparendos que la Policía no explica en qué se irán a invertir y unas inversiones presupuestales de la Gobernación de Antioquia de más de 20 mil millones de pesos para todas las subregiones, con escasos resultados. Así como los casos que registramos de personas que no pudieron reclamar los 100 mil del programa Medellín Me Cuida.

Que los hospitales estén dejando morir a los adultos mayores excusándose en el virus éste, que se vayan en corrupción cerca de 50 billones de pesos al año y no tengamos educación y salud gratuita de calidad, cuando se está denunciando a nivel nacional el cartel del covid. Que ésta también haya sido la excusa perfecta para obtener los datos personales de las personas, limitar su libertad y aumentar la economía de los grandes capitales en detrimento de las personas que están en la informalidad, es muy diciente de la política económica dirigida que está en ciernes.

Y que la justicia y nosotros los medios de comunicación quienes somos los llamados a cuestionar y hacer seguimiento al poder, independiente de su ideología, somos los primeros que nos arrodillamos por tres pesos.